¿Qué es la aumentación ósea?

La aumentación ósea en la columna es un procedimiento quirúrgico diseñado para incrementar la masa ósea en la columna vertebral, especialmente en áreas donde ha habido pérdida ósea, fracturas, o degeneración. Este procedimiento puede ser crucial para mejorar la estabilidad, el soporte estructural y la función de la columna vertebral, y se utiliza a menudo en el contexto de cirugía de columna para tratar diversas condiciones.

La aumentación ósea en la columna se realiza en varias situaciones, como:
  1. Pérdida ósea: Puede ser causada por condiciones como osteoporosis, infecciones, o tumores que debilitan la estructura ósea.
  2. Fracturas vertebrales: Especialmente fracturas por compresión que no cicatrizan adecuadamente y que pueden llevar a deformidades o inestabilidad.
  3. Deformidades espinales: Como en el caso de la escoliosis, donde puede ser necesaria la reconstrucción ósea para restaurar la alineación adecuada de la columna.
  4. Soporte para implantes: Al realizar procedimientos como la fusión de columna, donde se requiere suficiente masa ósea para asegurar implantes o dispositivos de estabilización.
Existen varias técnicas que se pueden utilizar para la aumentación ósea en la columna:
  1. Injertos óseos: Se puede utilizar un injerto óseo del propio paciente (autoinjerto), de un donante (aloinjerto) o material sintético que favorezca la formación de nuevo hueso en el área afectada.
  2. Cementos óseos: En algunos casos, se utiliza cemento óseo para estabilizar fracturas vertebrales. Este material se inyecta en el espacio del hueso fracturado para proporcionar soporte inmediato.
  3. Distracción osteogénica: En esta técnica, se realiza un corte en el hueso y se separa lentamente usando un dispositivo. Esto permite que se forme nuevo hueso en el espacio creado.
  4. Vertebroplastía y cifoplastía: Son procedimientos mínimamente invasivos donde se inyecta cemento óseo en las vértebras fracturadas para estabilizarlas y aliviar el dolor.
  • Mejora de la estabilidad: Aumenta el soporte estructural en la columna vertebral, lo que ayuda a prevenir el colapso de las vértebras.
  • Alivio del dolor: Puede reducir el dolor asociado con la inestabilidad o las fracturas vertebrales.
  • Restauración de la función: Mejora la movilidad y la función general de la columna vertebral, permitiendo a los pacientes retomar sus actividades diarias.
Como cualquier procedimiento quirúrgico, la aumentación ósea en la columna puede conllevar ciertos riesgos, incluyendo:
  • Infección.
  • Rechazo del injerto o complicaciones relacionadas con el cemento óseo.
  • Dolor persistente o complicaciones en la cicatrización del hueso.
  • Lesiones nerviosas si no se maneja adecuadamente el tejido nervioso circundante durante la cirugía.
La recuperación puede variar según el tipo de procedimiento realizado y la salud general del paciente, pero generalmente incluye:
  • Reposo: Durante un período inicial, se puede recomendar limitar ciertas actividades.
  • Fisioterapia: La rehabilitación es fundamental para restaurar la movilidad y fortalecer la columna vertebral.
  • Seguimiento médico: Se realizarán controles regulares para evaluar la curación y la integración del injerto.